Se calcula que en Europa anualmente se pierden alrededor de 600 millones de toneladas de recursos contenidos en los residuos que pueden tener potencial como fuente de materias primas secundarias, hecho que pone de manifiesto la necesidad de entender los residuos como posibles recursos.

En esta línea, el pasado 2 de diciembre de 2015, la Comisión Europea adoptó el nuevo paquete de economía circular, que consiste en un conjunto de medidas que pretenden guiar la transición de la economía Europea hacia un modelo de crecimiento económico más sostenible.

El paquete de economía circular incluye propuestas legislativas en materia de residuos, así como un plan de acción, cerrar el círculo, que concreta las propuestas estableciendo las medidas necesarias para abordar todas las fases del ciclo de vida de los productos, desde la producción, pasando por el consumo y la gestión del residuo, hasta el mercado de materias primas secundarias.

Entre otros aspectos, se incluyen objetivos a largo plazo para reducir la deposición en vertederos y aumentar la preparación para la reutilización y el reciclado de flujos clave de residuos. También se plantean establecer condiciones generales, comunes en todo el entorno europeo, para armonizar procedimientos y evitar los obstáculos que supone la diversidad de criterios en términos de gestión de residuos entre los estados miembro.

Todo ello con el objetivo de contribuir al uso eficiente de los recursos, no solo por su impacto positivo sobre el medio ambiente, asociado a la minimización de la extracción de recursos y a la reducción de vertidos, sino también por el impacto económico que puede generar en términos de ahorro de materias primas y generación de empleo.

A continuación se mencionan las diferentes propuestas de modificación planteadas sobre directivas de residuos:

Propuesta de Directiva sobre los residuos

Propuesta de Directiva sobre los residuos de envases

Propuesta de Directiva sobre vertederos

Propuesta de Directiva sobre residuos eléctricos y electrónicos

 Concretamente se destacan las modificaciones propuestas en el artículo 5 y 6 referentes a la figura del subproducto y Fin de Condición de Residuo, de la Directiva 2008/98/CE sobre los residuos, por ser consideradas herramientas que reflejan la concepción de los residuos como recursos.

Se propone que los estados miembro deberán garantizar el reconocimiento de la figura de subproducto y Fin de Condición de Residuo para potenciar el aprovechamiento de los recursos en el entorno Europeo. Para ello cada estado deberá adoptar reglamentaciones técnicas que regulen dichas figuras, con la obligación de notificar la reglamentación adoptada a la Comisión Europea, para su revisión y aprobación, según lo establecido en la Directiva 2015/1535/CE, referente al procedimiento de información en materia de reglamentaciones.

Cabe destacar que en la actualidad ya existen países que regulan estas figuras, como el caso del subproducto en Irlanda o Francia, y en España se ha definido un marco de solicitud que deberá culminar en Órdenes Ministeriales que permitan la declaración de subproducto de algunas corrientes residuales. En el caso del Fin de la Condición de Residuo en Reino Unido, por ejemplo, se han definido diversas guías técnicas que van más allá de los Reglamentos Europeos de chatarra y vidrio, ofreciendo un marco para otros materiales, como por ejemplo para granulados de caucho procedentes de neumáticos o para aceite mineral usado.

En la propuesta también se recoge que el Parlamento Europeo y el Consejo delegarán a la Comisión la capacidad de modificar o complementar los criterios sobre la aplicación de las condiciones del subproducto a sustancias u objetos específicos, así como también podrá determinar criterios detallados sobre la aplicación de las condiciones de fin de condición de residuo a determinados residuos. Respecto al fin de la condición de residuo, los criterios incluirán valores límite para sustancias contaminantes, cuando proceda, y se tendrá en cuenta el posible efecto nocivo sobre el medioambiente.

• Las condiciones de subproducto se concretan en el apartado 1 del artículo 5 de la Directiva 2008/98/CE sobre los residuos.
• Los criterios de fin de condición de residuo se concretan en el apartado 1 del artículo 6 de la Directiva 2008/98/CE sobre los residuos.

Otro aspecto importante que añade la propuesta de modificación de la directiva marco de residuos, es que el material resultante de un proceso de valorización acorde a la fin de la condición de residuo, computará para el cálculo de objetivos de preparación para la reutilización, reciclado o valorización, en función del proceso al que haya sido sometido. En este aspecto, en cuanto a la figura del subproducto no se modifica respecto la directiva 2008/98/CE sobre residuos, de modo que seguirá sin computar en los objetivos de valorización, ya que no será residuo de producción, pero incidirá en una disminución de la producción de residuos y por tanto en la eficiencia en el uso de recursos.

La simplificación de las condiciones y criterios de fin de condición de residuo, así como la facilitación de trámites administrativos para gestionar residuos bajo la figura del subproducto, se entienden como herramientas para la armonización de procedimientos de los estados miembro en la Unión Europea. Las modificaciones propuestas pueden significar un gran avance para cumplir con el objetivo de lograr una Europa eficiente en el uso de recursos, lo que supondría una gran reducción en el uso de materias primas primarias, contribuyendo a un modelo económico más sostenible y a una mayor conservación del entorno que nos rodea.