mat

quimico (55)
plástico y caucho (39)
papel y carton (14)
Metal (12)
orgánicos animales y vegetales (26)
madera y biomasa (24)
inorgánicos y vidrio (10)
textil y piel (13)
Aguas industriales: Salinas, de proceso, residuales y/o depuradas (3)
Lodos EDAR/EDARi (1)
otros (18)

+



China, primera potencia mundial también en materias primas

En Marzo de 2012, la Unión Europea (UE) junto con los Estados Unidos de América (USA) y Japon, iniciaron un procedimiento por el cual denunciaban que los aranceles de exportación y las cuotas impuestas por China a ciertas materias primas eran incompatibles con los compromisos adoptados con la Organización Mundial del Comercio (World Trade Organization- WTO). La lista de materias primas afectadas por esta denuncia a la WTO son diecisiete elementos pertenecientes al grupo de las tierras raras (lantano, cerio, praseodimio, neodimio, prometio, samario, europio, gadolinio, terbio, disprosio, holmio, erbio, tulio, iterbio, lutecio, escandio e itrio), además de otras dos materias primas, tungsteno y molibdeno.

Las tierras raras son utilizadas en todo tipo de aplicaciones, ya sean nuevas tecnologías como tecnologías usadas en el día a día por la sociedad: turbinas eólicas, ordenadores, cámaras fotográficas, dispositivos telefónicos, televisores, incluso muchas partes de un coche requieren de estas materias primas. Las tierras raras pueden representar hasta el 50% del coste de algunos componentes de turbinas o de pantallas LCD, siendo su impacto menor en teléfonos móviles. El hecho de que China controle más de un 90 % de la producción global de tierras raras hace imperativo vigilar las restricciones impuestas por China para garantizar un suministro a precios competitivos a la industria europea.

En cuanto al tungsteno, China, Vietnam y la Federación Rusa aplicaron unas tasas de exportación en el 2009, tasas a las cuales otros países se sumaron (p.e. en el caso del cobalto tanto China como Argentina, Vietnam y Filipinas acordaron establecer unas tasas conjuntamente y lo mismo ocurrió con otras materias primas). Así, para el año 2010, el porcentaje de exportaciones globales afectadas por restricciones equivalía al 96% de las tierras raras, el 58% del magnesio, el 48% del tungsteno y el 18% del cobalto. No hay ningún acuerdo internacional promovido por la WTO que regule específicamente el comercio de materias primas, por lo que se aplican las provisiones generales de exportación del WTO, insuficientemente definidas, y que ofrecen menor protección ante posibles prácticas que puedan distorsionar el mercado.

A pesar de alegar la conservación de recursos naturales, estas restricciones impuestas por China afectaban a la exportación pero no a su suministro interior, dando una ventaja competitiva a las empresas chinas. En algunos casos, un comprador de origen no chino debe pagar el doble por un mismo producto y cantidad que un comprador local, hecho que favorece la deslocalización de la industria europea de componentes y el establecimiento de empresas en China.

Anterior a este caso, encontramos otra querella en el año 2009 formulada por UE, USA y Méjico contra China. Las causas fueron las mismas, aunque las materias primas implicadas eran la bauxita, el coque, el magnesio, el manganeso y el zinc. WTO se decantó por los argumentos de la parte de occidente, forzando a China a levantar sus aranceles sobre dichas materias primas. La justificación de China por las restricciones se basaba en la aplicación de sus políticas de conservación y de preservación del medio ambiente, según palabras del Ministro de Comercio.

Como resultado del fallo del WTO, China levantó las restricciones a la exportación y las cuotas sobre los productos en cuestión, pero mantiene aún la obligación de una licencia de exportación específica de estas materias primas. La eliminación de las restricciones mejoró el nivel de igualdad de condiciones en el mercado internacional de las materias primas. Por ejemplo, los precios de exportación del coque chino pasaron de 470 $ por tonelada a 300 $.

Finalmente, en agosto de 2014, el Órgano de Apelación del WTO falló a favor de la UE, USA y Japón en el procedimiento iniciado en marzo de 2012 en cuanto a las diecisiete tierras raras, el tungsteno y el molibdeno. El argumento de China para justificar las restricciones fue otra vez sus políticas de conservación aplicadas sobre las tierras raras, sin embargo, según la WTO, las restricciones a la exportación no se pueden justificar con la finalidad de conservar recursos naturales no renovables cuando a nivel nacional no se limita su producción o consumo con el mismo propósito.

Sin embargo, la situación actual de las restricciones de exportación chinas dista de estar solucionada. Con su adhesión a la WTO, China se comprometió a eliminar todos sus aranceles a excepción de 84 líneas arancelarías específicas, a día de hoy, todavía se aplican 346 líneas arancelarias, así como cuotas de exportación y regímenes de licencia en muchos productos.

China ha mostrado claramente su independencia tomando decisiones que afecten a su economía y a la economía global, y no le faltan elementos estratégicos de negociación, como es el caso de las tierras raras. Esta misma semana, el Fondo Monetario Internacional, situó por primera vez a China como la primera potencia económica mundial en paridad de poder adquisitivo.

¿Qué poder de negociación tiene Europa para asegurar el suministro de estas materias primas estratégicas y afrontar la reindustrialización a la que aspira?

En cualquier caso, siempre nos quedarán los residuos...